• al ritmo de los palitrocs o totxets

Las teorías acerca del origen de la danza de los palitroques (palos pequeños y toscos ) son variadas, Algunos dicen que vienen de ritos paganos, casi guerreros, como una evolución de las danzas de espadas. Otros creen que tienen más que ver con ritos agrarios ancestrales para propiciar la fertilidad de la tierra.

En este sentido, Josep Crivillé apunta que los palos o pequeños bastones (o sea los palitrocs o totxets) fueron usados por nuestros antepasados para sembrar. De hecho, en muchos pasos de este baile, los propios danzantes se inclinan hacia la tierra y clavan el palo en ella recordando esta actividad agraria. Ideal para una rave. Lo estoy visualizando: los gaiteros punteando el CLOC-CLAC de los palitroques entrechocando entre sí alternado con el PLAS-PLAF que se oyen al clavarlos contra el suelo! 

Hay que decir que aunque las gaitas son las protagonistas musicales hoy en día, ¡los palitroques han bailado al ritmo de todo tipo de música, desde violines hasta bandas municipales enteras!

  • ¡Fiesta salvaje en Benabarre!

Imagina una fiesta medieval con música, baile y mucha historia. El "Ball dels Salvatges" (el Baile de los Salvajes) es una tradición que volvió a vida en Benabarre después de casi desaparecer. Se trata de un espectáculo donde caballeros, damas y salvajes se enfrentan en un juego de amor y deseo. Los salvajes representan el lado salvaje y primitivo que todos llevamos dentro, ¡un poco de caos y desenfreno en recuerdo de nuestras raíces!

Esta representación que se celebra cada dos años en agosto desde 2010, fue declarada Fiesta de Interés Turístico de Aragón en 2016, y se recuperó gracias a antiguos escritos, partituras y fotos por la minuciosa labor de documentación llevada a cabo por el etnógrafo Manuel Benito.

¡Si quieres una experiencia única y llena de historia, no te pierdas la próxima edición dels Salvatges!