la pastorada

las pastoradas y la de Benabarre


Las Pastoradas, una de las muestras más notables del folclore aragonés, son representaciones dialogadas en las que los personajes intercambian, sin cortarse ni un pelo, burlas sobre anécdotas o hechos graciosos ocurridos a los habitantes del pueblo durante el año.

Se remonta al siglo XVIII y se mantuvo ininterrumpida hasta 1920. Después de la Guerra Civil de 1936, casi no se conservaron en ningún lugar. Hoy sólo se mantiene la tradición en Benabarre, donde se recuperó en 1953 con la composición de un nuevo texto aprovechando los fragmentos que aún recordaban algunos habitantes del lugar. Desde entonces, se ha ido representando hasta la actualidad el 8 de junio, festividad de San Medardo, en la plaza mayor.

Las Pastoradas tienen un origen religioso; en ellas se recita el evangelio para homenajear al santo patrono del lugar. Por ese motivo, generalmente se representan coincidiendo con la celebración de la fiesta patronal y en presencia de las autoridades eclesiásticas y civiles, clásicamente el párroco y el alcalde.

La Pastorada de Benabarre tiene el siguiente esquema: comienza con un monólogo de presentación del rabadán al público, que además incluye una alabanza a San Medardo. Cuando el rabadán acaba la intervención aparece su amo, el pastor, que queda sorprendido por la presencia del mozo y le pregunta por qué ha dejado el rebaño solo. El rabadán se hace el despistado e intenta esconder su identidad hasta que se descubre quién es realmente.

Pero sin duda es la parte de la representación que viene a continuación la más esperada y jaleada por los presentes (menos aquellos a los que se alude, claro está): cuando se pasa revista a los hechos locales más importantes del año en un tono satírico y de chanza. De hecho, la Pastorada está hecha para ser recitada y transmitida de forma oral, y así, al ser conocida por muchos, se establece fácilmente un estrecho contacto entre los personajes y la audiencia.

En este caso, la lengua que se usa revela características del catalán hablado en Benabarre, el cual se adscribe al subdialecto ribagorzano del catalán occidental, aunque con una importante presencia de aragonesismos. 
Así por ejemplo, los últimos versos de la Pastorada de este año 2025, recitados a dúo por los protagonistas, sonarían en benabarrense castizo más o menos así, en transcripción libre, claro está:

"Ara ya mos despedim,
con golpe de totxo, sombrero a les mans
i la bota buida de vi.
Esperan que San Medardo
mos cuide pa podre seguí fen camí."

Fotos y vídeo extraídas del blog Demasiadas Noches